Desde el inicio de la humanidad siempre existió una forma de manipular y dominar al hombre.
La forma más fácil y didáctica fue desde un inicio la religión (sea cual sea esta); aunque claro esta la reina de la dominación es sin duda la Iglesia católica apostólica y romana; pasando luego por las putas monárquicas o en palabras más burguesas monarquías europeas.
Con el renacimiento esta red de dominación cristiana cayó y luego las monarquías con la independencia de las 13 colonias de EE.UU y con mucha más fuerza en la revolución francesa, que fue quizás el primer grito agónico de libertad, que repercutió en toda Europa. Este fue quizás el primer momento en que el hombre pidió su libertad de la monarquía y de la iglesia. ¿Lo consiguieron? Claro que no. La desmesura fiel compañera del hombre les hizo una muy mala jugada.
Hoy en día en la era del internet; de la LIBERTAD, nadie se da cuenta que la próxima dominadora; la próxima capataz de la época es con mucha exactitud nuestra misma libertadora: el internet.
Por qué nadie abre los ojos y mira que ya estamos subyugados nuevamente, de una forma más sutil; más delicada, digna de los intelectuales a los que seduce con sus redes.
Al leer un artículo de la revista somos escrito por Verónica Klingenbergen, en donde comentaba de forma irónica sobre la “libertad” que existe en el mundo. Libertad que permite que todos sepan todo sobre todos (o busca ello). El google, facebook, twitter e incluso el mismo correo electrónico son los principales aliados para ello y sin embargo existe un caso en EE.UU en donde hace dos meses han capturado a un joven de 27 años, Jacob Applebaum que publicó documentos hasta hace poco confidenciales sobre el gobierno estadounidense y brinda un programa por el cual una puede conectarse al internet sin que se sepa su identidad.
El internet hoy en día domina el mundo. Es la única explicación para que un jovencito de 27 sea perseguido, no por matar o robar; sino por saber demasiado y por medio de la red poner al descubierto información confidencial de EE.UU.
La tiranía que estamos viviendo es por demás llevadera. Aun así viendo jóvenes adictos a la pc que no tienen otro sentido en la vida que ganar un juego de Starcraf, solo puedo pensar que nos han ganado. Nos han subyugado. No, no nos han subyugado. Nos han matado a unos más que a otros. Nos han vuelto autómatas dándonos diversión y una falsa idea de libertad. Qué más podíamos pedir.
Salimos del colegio, llegamos a casa…
Haré mi tarea; pero primero una horita en el inter.
Entro. Click. ¿Qué hacer? Msn. Hola. Hello. ¿Cómo estás? Bn. Zumbido. ¿Qué haciendo?..
Salimos del trabajo. Prendemos la TV. Entramos a internet. Otra vez la misma historia y seguimos autómatas, muriendo con cada click.
Y me pregunto en qué momento la gente piensa, si es que piensa. Qué fácil una vida sin mayor esfuerzo y también me pregunto ¿Dónde está el cerebro de la gente? y si ahora es solo un maní más.
Necesitamos que la gente piense para vivir una tiranía sosegada, que es lo máximo que podemos aspirar; que las personas tomen el tiempo de por lo menos abrir un periódico antes de el preciado click.
Yo ya no sueño con la libertad utópica de Rousseau; ahora solo me gustaría pensar que existe alguna forma de seguir muriendo quizás un poco más lento.